Seguro que todos habéis visto la película de Frozen, ya sea con vuestros hijos o amigos.
De ésta película de Disney podemos sacar alguna que otra "moraleja". Os dejo a continuación algunos aprendizajes que he podido sacar al ver tantas veces ésta magnífica película:
1. No le quites la ilusión a nadie: Si ves a un amigo ilusionado con algo que sabes que no le va a gustar o le va a salir mal, déjalo que se equivoque solo, es la mejor manera de aprender. Olaf soñaba con el verano y nadie le quiso decir que si se ponía al sol se iba a derretir. Él siguió como si nada con su ilusión hasta que casi se hace agua. Suerte para él que existen las nubes personales.
2. “El que no busca, encuentra”: Anna parece haber encontrado el amor en un príncipe de ojos celestes que terminó siendo el malvado de la peli, sin darse cuenta se enamora de un chico cualquiera, humilde y sencillo. Sal, diviertete, baila con los ojos cerrados y si tiene que aparecer un príncipe, aparecerá. Cuando estés haciendo fotocopias o perdida en la montaña buscando a tu hermana, quizás se te acerque tu príncipe azul.
De ésta película de Disney podemos sacar alguna que otra "moraleja". Os dejo a continuación algunos aprendizajes que he podido sacar al ver tantas veces ésta magnífica película:
1. No le quites la ilusión a nadie: Si ves a un amigo ilusionado con algo que sabes que no le va a gustar o le va a salir mal, déjalo que se equivoque solo, es la mejor manera de aprender. Olaf soñaba con el verano y nadie le quiso decir que si se ponía al sol se iba a derretir. Él siguió como si nada con su ilusión hasta que casi se hace agua. Suerte para él que existen las nubes personales.
2. “El que no busca, encuentra”: Anna parece haber encontrado el amor en un príncipe de ojos celestes que terminó siendo el malvado de la peli, sin darse cuenta se enamora de un chico cualquiera, humilde y sencillo. Sal, diviertete, baila con los ojos cerrados y si tiene que aparecer un príncipe, aparecerá. Cuando estés haciendo fotocopias o perdida en la montaña buscando a tu hermana, quizás se te acerque tu príncipe azul.
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